Herbert Orr pensó que tenía una mejor idea para un cartucho de cinta sin fin cuando se unió en equipo a Bernard Cousino para fabricar el cartucho Automate 8 Pistas. El AutoMate, siguió al cartucho original de Cousino, el Echo-Matic en términos de diseño. Aunque el formato de cinta era compatible, las carcasas no lo eran. El cartucho Auto-Mate se vendió bastante bien a mediados de los 60´s. En lo referente a la calidad de sonido, ofrecía una ligera mejora en calidad que el Bill Lears 8 track. Como el fabricante Bill Lear, estaba disfrutando de éxito con otros negocios aeronáuticos, abandonó un poco esta faceta de su negocio y como consecuencia ganó cuota de mercado el cartucho de 8 pistas tradicional y el Orrtronic Auto-mate fue cayendo en ventas.
