En un principio, Fernando Crudo había construido un aparato capaz de registrar el sonido, variaciones de presión que se producen y transportan por el aire. Esas variantes eran impresas con tinta común al papel.Fernando Crudo patentó el invento el 23 de noviembre de 1934.Para reproducir el fotoliptograma, se proyecta un haz de luz concentrado con lentes sobre el soporte (que podía ser cualquier papel inclusive de periódico) con el registro, cuando el cilindro gira, las franjas que forman la línea en espiral en el cilindro, son sucesivamente escaneadas por el reflejo que genera el haz de luz, aquellas reflacciones irregulares son captadas por una célula fotosensible. Las variaciones luminosas se transformaban en ondas de corriente sinusoidales, que posteriormente se amplificarían para que el usuario pueda escuchar la grabación.Crudo también ideó un soporte que reemplazaba al papel por una película fotosensible, la cabeza grabadora ahora era una lámpara cuya intensidad luminosa dependía directamente de las variaciones de tensión provenientes del sonido que se captaba por el micrófono.5 Se probaron dos diferentes formas de grabación, por intensidad variable o en amplitud de grises. Cuando el registro ya se encontraba concluido, se procedía al revelado, en el caso de la película fotosensible.En su momento se pensó en la idea de publicar registros en los diarios, para que al ser recortados puedan ser reproducidos, o también como audiolibros para ciegos.El invento fue presentado en varias ciudades de Europa, despertando el interés por el invento en países como España o en ciudades como Londres.
CABEZAL
Detalle grabación
Paginas sonoras circular y rectangular.